Amar es enseñar al que no sabe y no criticarlo y culparlo porque no sabe, y cuando se ve que no sabe.
Amor no es dar limosnas por la calle, ni dar todo lo que se nos pide. No es facilitarle todo lo que le falte a todo el que se acerque a nosotros.
Hay personas que creen que es el deber de ellas componerles íntegramente todos los problemas a los demás.
Eso es impedirles que adelanten por sus propios esfuerzos. Es quitarle su karma y apropiárselo.
El amor es, pues, ser manso y humilde de corazón.
El que está en el amor divino no cuenta sus hazañas, las curaciones que logra, los problemas que resuelve en los demás, porque es prueba de que se ama más a él mismo de lo que ama a dios. Cuando se está haciendo un tratamiento no se cuenta, no se habla a otros lo que se está tratando porque se desperdiga la fuerza. Cuando Jesús sanaba pedía que no se lo dijeran a nadie, ya que el referirlo es orgullo espiritual, o considerar más importante tu hazaña, tu presencia material. Conny Méndez
Un mantra puede ser una sílaba, una palabra, una frase o texto largo, que al ser recitado y repetido va llevando a la persona a un estado de profunda concentración.
No basta la repetición del puro sonido sino que es necesario concentrarse en su significado, así, el mantra nos llevará de las cadenas de la ilusión a la libertad de la sabiduría.
El mantra, sonido sagrado, debe vibrar no solo en el aire sino en la mente para que el pensamiento y el sonido sean uno.
Todos los hombres son uno y yo soy uno con ellos.
Todas las almas son una y yo soy una con ellas.
Busco amar y no odiar.
Busco servir y no exigir servicio.
Busco curar y no herir.
Que el dolor traiga la debida recompensa de luz y amor.
Que el alma controle la forma externa.
La vida y todos los acontecimientos.
Y traiga a la luz el Amor.
Que subyace en todo cuanto ocurre en esta época.
Que venga la visión y la percepción interna.
Que el porvenir sea revelado.
Que la unión interna sea demostrada.
Que cesen las divisiones externas.
Que prevalezca el amor.
Que todos los hombres y mujeres amemos.
Sopla el Viento Fuerte del Espíritu Santo. El resplandor de Mil Soles del Espíritu Santo me inunda. El Espíritu Santo está aquí, con sus Siete Dones, que a mi mente viene a visitar, a encender Su Amor en los corazones, a iluminar mis sentidos, a inflamar con Su Amor mi afecto, a fortificarme y expulsar al pérfido enemigo, dándome Guía y Paz.
Ven (X3), Espíritu Santo, Ven (X3)
Visualiza un óvalo rosado, con radiación dorada, de resplandor azul, que sostiene en su centro la paloma del Espíritu Santo descendiendo y emanando hacia abajo los Siete Rayos.
Ven, Espíritu Santo, Ven, con la plenitud de Tu Amor, la Sabiduría del Hijo y el Poder del Padre, a derramar Tus Siete Santos Dones sobre toda la humanidad.
SANTO ALIENTO
"Yo Soy" inspirando el Amor y los Siete Dones del Espíritu Santo.
"Yo Soy" absorbiendo el Amor y los Siete Dones del Espíritu Santo.
"Yo Soy" expandiendo el Amor y los Siete Dones del Espíritu Santo.
"Yo Soy" proyectando el Amor y los Siete Dones del Espíritu Santo.
En el Nombre de la Divina Presencia de Dios "YO SOY", invocamos el Rayo Rosa del Amor Divino para visualizar "Lenguas de Fuego" sobre nuestras cabezas, y una Paloma Blanca descendiendo, que es el Patrón Electrónico del Espíritu Santo Cósmico.
Digamos el VENI CREATOR SPIRITUS:
Ven Espíritu Creador, de los tuyos tu mente a visitar, a encender en tu amor los corazones, que de la nada te gustó crear. Tú, que eres gran Consolador y Don Altísimo de Dios, Fuente viva, Amor, Fuego ardiente y Espiritual unción. Tú, tan generoso en dádivas. Tú, poder de la diestra paternal. Tú, promesa magnifica del Padre que el torpe labio vienes a soltar.
Con Tu Luz iluminas los sentimientos, los afectos inflame con Tu Amor. Con Tu Fuerza invencible fortifica la corpórea flaqueza y corrupción.
Lejos expulsa al pérfido enemigo, danos pronto Tu Paz. Siendo Tú nuestro guía toda culpa logremos evitar. Dénos Tu Influjo conocer al Padre, dénos también al Hijo conocer. Y en Ti, del Uno y Otro, Santo Espíritu, para siempre creer.
A Dios Padre alabanzas, honor y gloria, con el Hijo que un día resucitó.Y a Ti, Abogado y Consuelo del Cristiano, por los siglos se rinda admiración. Amén. Gracias Padre.
