OBSERVACIÓN
La Observación es una cualidad del Segundo
Rayo, tan importante, que sin ella los demás Aspectos de Dios y Rayos son
imposibles de desenvolver.
Observar es percatarse de algo, darse cuenta
de un hecho, estar alerta, atento, despierto a lo que sucede, viendo realmente,
sin agregarle la fantasía de la mente ni las emociones; sin los conceptos
religiosos, políticos, sociales o morales que tenemos grabados.
La Observación es la actividad primordial de
mayor importancia entre todas las que se puedan realizar en una Vivencia
Espiritual, y pertenece al Segundo Rayo Dorado.
Por medio de la Observación podemos comenzar
a transformar el conocimiento en sabiduría, que luego se desarrolla en
Omnisciencia; esta, a su vez, se convierte en Iluminación; y la Iluminación nos
lleva a la Ascensión, al percatarnos, asumir y Ser la Realidad de nuestro “Yo
Soy”, el Existir, la Totalidad de la Vida, los Siete Aspectos de Dios, los
Siete Principios y los Siete Planos.
Libro: “Rayo
Dorado”, de Rubén Cedeño.
Editorial Manifestación & Editorial
Señora Porteña.