domingo, 1 de diciembre de 2013

INVOCANDO AL CRISTO

INVOCANDO AL CRISTO

Poderoso Cristo de la Tierra,

Amado Señor KOOT HOOMI,

“Yo Soy” invocando Tu Sabia y Amorosa Presencia

para la Bendición de toda la humanidad

y el restablecimiento, en la Tierra,

de la ¡Perfecta Religión, Filosofía y Pensamiento Universal! 

Eternamente, amén.

Rubén Cedeño ; libro: “SERVICIOS”.
Edit. Manifestación & Edit. Sra Porteña.




Estamos despertando ? o preferimos seguir dormidos?




Despertando
Rubén Cedeño
Es bueno ver al que comunica la Enseñanza en vivo, sin editar y no en vídeo, libro o internet. Cuando un Facilitador honesto y veraz, esta en vivo y da la enseñanza que se requiere en el momento, si hay que regañar, retar y corregir, lo hace y estas cosas un video, un libro o el Internet generalmente no las revela.
Por eso muchas veces cuando la gente se acostumbra a recibir las enseñanzas en videos, internet, o libros, cuando ve a un verdadero y genuino instructor, muchas veces se decepciona.
Un Metafísico que no esta dispuesto a hacer un sacrificio por los demás, a deponer su “yo personal”, esta perdiendo su tiempo; porque el Facilitador muchas veces esta dejando la comodidad de su casa durante días y meses, andando en metro, carreteras y sin donación amorosa, para venir a dar una conferencia, y si una persona no es capaz de hacer lo mismo, no merece estar en un grupo, mejor que se salga.


SERVICIO

En la Metafísica hay que estar presto al servicio, a la renuncia, porque si no, somos Metafísicos de palabra. No se hace nada con una insignia metafísica colocada en el pecho y con la vestimenta del color del rayo del día que puede que no nos este haciendo nada. 
Si a uno no se le ve la metafísica instruyendo a la gente, yendo a las imprentas y librerías para expandir la instrucción, visitando los hospitales para ayudar a los enfermos, visitando las cárceles llevándole liberación a los reclusos, entonces la Metafísica no sirve para nada. 
La Metafísica se nos tiene que ver en la cara y en la actitud y forma de hablar a las personas. 
Uno puede andar como roquero, con un traje de moda, de sirvienta o vestido de medico, y la Metafísica se nos tiene que ver por encima de la ropa. 
Esta enseñanza es para vivirla no para estarla demostrando con un uniforme, insignia, ni con nada, esto hay que llevarlo interno, adentro y una de las cosas que debemos tener es la humildad. 
Las personas sentadas que no están prestas a moverse a hacer algo metafísicamente viven en el estado de “inercia”, que es el mas deplorable de la materia; 
La actividad es cuando se mueve la gente a buscar un Facilitador, enseñar, y transformar el entrono. 
Es lo que hace evolucionar, pero cuando una persona no cede el puesto no esta dispuesta al servicio a moverse a cambiar esta en “inercia”.


PERSONALIDAD

Cada uno de nosotros arrea un burro que es la personalidad, que es terco, patea, no esta presto al servicio, ni al cambio, ni a ceder. 
A ese burro, como a todos, hay que regañarlo, educarlo para que aprenda. 
Si uno tiene un instructor de Metafísica que no educa al burro de la personalidad, ese instructor es malo. 
El buen instructor como el buen jinete es el que sabe domar el burro. 
Cada uno de nosotros tiene su burro y hay que domarlo. 
Algunas personas sin el espíritu de la Metafísica se van de las clases al tratar de domar ese burro, y otros lo que hacemos es dar gracias a Dios por ello. 
Hasta el sol de hoy no se ha ido nadie inteligente, comprensivo y culto, porque la gente así, comprende lo que es verdaderamente la Metafísica siempre se quedan, agradecen y están felices de estas enseñanzas como se dan.
La gente rebelde que no quiere que su “yo personal” se lo hieran se van. 

Esos no merecen estar aquí, no van a llegar a ninguna parte nunca en la vida. 

No somos maestros complacientes. 

No hay instructor complaciente que sea bueno. 

No esta bien si un niño hace una letra torcida y no se le dice nada. 

Hay que reflexionar eso hoy y todos los días. 

La gente es muy cómoda; pero para evolucionar hay que dejar la comodidad: Morelos, Bolívar, San Martín, Artigas, El Cid, Gandhi, la Madre Teresa de Calcuta no vivieron cómodamente. 

Los que trabajaron para la enseñanza, la cultura e independencia de un país se sacrificaron, hicieron grandes esfuerzos. 

Si nosotros queremos hacer algo por nuestro país tenemos que movernos.



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