PARTICIPACIÓN
Participar es renunciar
al “yo personal” en cuanto a la particularidad, la privacidad, el exclusivismo.
Cuando todos comen un tipo de alimento, comámoslo también.
Alegrémonos con todos los
que se alegran por un motivo sano.
Vistámonos igual que los
demás en cuanto a moda y usanzas se refiere, y no diferente, al no utilizar
uniformes, ropa de otro país, o vestimenta que se considere de usanza
espiritual.
Esto conduce a una unión
con las otras almas.
Participar de las
creencias de los demás, es visitar los templos y lugares de peregrinación que
no son de nuestra costumbre.
Se participa del dolor de
nuestro amigo; no podemos estar felices cuando nuestro amigo está triste o
sufriendo por algo.
Del libro: “Asuntos del Alma”, de Rubén Cedeño. -Edición conjunta: EDITORIAL MANIFESTACIÓN
& EDITORIAL SEÑORA PORTEÑA.