SACIAR LA SED
DEL PRÓJIMO
Si alguien acude a ustedes con sed y les da
una copa, su primer impulso será el de llenar esa copa con algún líquido, para
satisfacer el deseo en los vehículos del individuo.
En el momento en que llenan la copa y se la
devuelven al individuo, cesa la responsabilidad de ustedes.
Si él la bebe, la derrama o le da cualquier
otro uso a esa bebida, no es responsabilidad de ustedes ni requiere de la
atención adicional de sus pensamientos y sentimientos, excepto en lo
concerniente a hacer un decreto pidiendo la iluminación para dicho individuo.
Santo Aeolus; “Espíritu Santo”. -Edición conjunta: EDIT. MANIFESTACIÓN &
EDIT. SEÑORA PORTEÑA.