El “Fuego Violeta” es una Energía Cósmica
Transmutadora que se la aplica por medio del pensamiento, el sentimiento y la
invocación, y que tiene el Poder de Transmutar lo negativo en positivo,
Libertar el sufrimiento, la limitación y opresión. Perdonar y disolver el mal
karma, consumiendo todos los errores cometidos por nosotros y la humanidad,
además de “Proteger” contra todo lo negativo.-
Es
la Llama que corresponde a la nueva Era de Acuario que se inicio en 1954,
reemplazando a la Era de Picsis que ya cumplió con su Plan Divino de
Perfección.
TRANSMUTACIÓN
Transmutar
es cambiar lo negativo por positivo.
Eso que era malo, en la misma intensidad
convertirlo en bueno, como la ofensa en olvido, el odio en PERDÓN, la
enfermedad en Salud, la Ignorancia en Sabiduría, la represión en Libertad.-
Este es un Aspecto de Dios, surgido de la necesidad humana cuando se manifiesta
la imperfección y hace falta transformarla en Perfección. Reconociendo y
activando uno de los Aspectos de Dios.
INVOCACIÓN DEL PERDÓN
DEL FUEGO VIOLETA
“YO SOY”
ENCENDIENDO EL “FUEGO VIOLETA CONSUMIDOR”del Perdón y del Olvido, con toda su
acción dinámica, consumiendo toda causa y efecto, registro y memoria de los
errores pasados, presentes y futuros cometidos por mí y por toda la humanidad y
sustituyéndolos por la Plena Perfección de los Maestros Ascendidos.
Le digo a todo el que me hace
daño:
Poderosa Presencia “YO SOY”, ¡perdónalo!
Porque no sabe lo que hace, y
vela para que yo no haga lo mismo. Haz que no cometa otra falta.
Proyecta tu
Divino “Fuego Violeta” y envuelve a mis seres queridos, mi hogar, negocios,
finanzas, provisión económica y todo aquello que con mis familiares estén
asociados, y rodea a cada persona, cosa, lugar y condición bajo esta Radiación;
Expándelo! Envolviendo a todos los seres de este país y toda la tierra,
mantenlo eterna y sostenidamente encendido en todos los cuerpos y mente
humanos, con su actividad instantánea y Poder Purificador y Consumidor,
aniquilando todos los padecimientos y enfermedades, produciendo Curación y
Perfección, manteniendo su dominio eternamente, flameando a través de todo
cuerpo humano; borrando todo disgusto, inarmonía, egoísmo, celo, intolerancia,
duda, temor, y escasez.
Yo arrojo
toda creación humana, su causa y efecto, al Océano del Fuego Consumidor del
Olvido, reemplazándolo por la Presencia y Perfección Eterna de la “Magna
Presencia YO SOY”.
Gracias Padre.
Extraído del
Libro de Rubén Cedeño “FUEGO VIOLETA”
de Editorial Sra. Porteña
