MUÉVETE
Como una persona que estudia la
espiritualidad no te puedes quedar en la inercia, tienes que moverte, poner a
circular lo que aprendes, sabes y realizas de bueno.
Una persona que se mueve con la
Enseñanza Espiritual y trepida cuando se da cuenta de las grandes verdades que
lee e interpreta, siente que está tocada por el Espíritu de Dios.
Muévete ante el poder de esta
Enseñanza tan verdadera.
Ya ves, no hay porqué quedarse con la
espiritualidad dormida, pasiva, de solamente ir al grupo a aprender, a la
iglesia a rezar, o al templo a meditar.
Hay que mover la espiritualidad como
si fuera un terremoto transformador de las cosas.
“Chispazos de Metafísica”, de Rubén
Cedeño. -Edic. conjunta: GPO MATAFÍSICO SEDE CENTRAL& ED. SEÑORA DE LA LUZ..