CONFORTAMIENTO
Somos confortados el uno con el otro, únicamente cuando permitimos que
las corrientes de vida, los amigos, asociados, aspirantes y niños aprendan
dentro de sí mismos a ser autosuficientes y a logar la auto-maestría, dejando
la dependencia de las cosas externas, inclusive de los Seres Perfeccionados.
Estos Seres no son más que “indicadores del camino”, meros guías sobre
el sendero, maestros, instructores y facilitadores mediante los cuales todos y
cada uno de ustedes puede captar la plena importancia de controlar sus
pensamientos y sentimientos, y conocer el confort de ser capaces de pararse
solos en la dignidad de su propia Divinidad, exteriorizando la sustancia
electrónica desde el corazón de Dios, en la medida que la requieran.
Ese es el confort que deseamos traer.
Ese es el confortamiento que deseo darles, Mis bellos, brillantes y
benditos Espíritus de Dios.
Santo Aeolus; “Espíritu Santo”.
–Edición conjunta: EDIT. MANIFESTACIÓN & EDIT. SEÑORA PORTEÑA.