ORACIÓN HECHA
POR TI
Orar por otros es grandioso.
Pero, no
hay mejor oración, que llegue más rápido al corazón de Dios, que la que surge
del sentimiento, la mente y los labios del necesitado.
Todos tienen a Dios en su corazón, y Él oye
por igual todas las súplicas que le hace cada quien, ya que está igual de cerca
de cada ser humano.
A veces, las situaciones inarmónicas que te
aquejan surgen para que te des cuenta de los errores que estás cometiendo, los
corrijas y, en medio de esto, te allegues a Dios por medio de la oración.
Si otro hace esta oración por ti, se pierde
el efecto de lo que la situación y Dios están procurando, que es conducirte a
un cambio que te beneficiará.
Tienes que ser
el redentor de tus propias energías.
Decreta con Fe la virtud de Dios que más
necesitas y cree a ciencia cierta que el milagro ya está realizado.
Afirma:
“Dios
siempre me escucha.
Dios responde
cuando le oro con Fe”.
“Pilares de la
Metafísica”, de
Rubén Cedeño. -Edic. conjunta: GPO EDITORIAL METAFÍSICA & EDIT. SEÑORA
PORTEÑA.