BELLEZA
Dios no ha hecho nada feo en su Creación,
todo es hermoso, hasta una libélula;
por eso tú, como ser humano, puedes vivir
rebosante de Belleza.
Recordemos el hermoso pasaje de Jesús, donde
dice:
“Considerad los lirios de los campos, cómo crecen;
no trabajan ni hilan;
pero os digo que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió como uno de
ellos”.
Dios es capaz de engalanarnos con más
belleza que la que lucía Salomón con su fastuosa ropa de rey.
La Belleza nos eleva y nos saca del foso de
la depresión;
por eso este Aspecto de Dios se encuentra íntimamente ligado a la
“Llama de la Ascensión y la Pureza”.
Cada vez que te encuentres deprimido,
frustrado, te veas horrendo en el espejo, acuérdate de Dios y repite:
“Dios es Belleza y Ascensión.
Yo soy su hijo y la expresión más bella de su
Creación.
Yo no acepto
nada en mi mundo menor que su perfección”.
Rubén Cedeño ;“Rayo Blanco”.
Editorial Manifestacion & Editorial Señora
Porteña.