lunes, 24 de junio de 2013

Decimos que amamos a los hijos

FALSO AMOR A LOS HIJOS


Decimos que amamos a los hijos, pero muchos de nuestros hechos demuestran que no.

Los manipulamos, controlamos, absorbemos, creamos dependencia y ataduras, porque tememos quedarnos sin ellos y andar o llegar a viejos solos.

No queremos que el hijo se nos vaya o se vaya con una pareja, por temor a la soledad.

Entonces, en vez de querer a los hijos, tenemos apego con egoísmo.

Cuando se nos muere un familiar, muchas veces lagrimeamos amargamente, pero no lloramos al familiar, lamentamos nuestra soledad al imaginar la vida que vamos a llevar sin esa persona que se nos murió.

Uno llora por uno mismo, que su desgracia, y allí no hay Amor.

Rubén Cedeño;”Rayo Rosa”. – Edic.conjunta: EDIT.MANIFESTACION & EDIT.SEÑORA PORTEÑA.



A veces no amamos tanto como creemos

AMOR CONCEPTUAL


Cuando tasamos sinceramente lo que supuestamente amamos, son apenas pocos renglones que podemos llenar, aunque creamos que amamos muchísimo.

 Creemos que amamos a la pareja, pero es mentira, porque al verla con otra persona, se acaba el asunto.

 Esto no quiere decir que debamos apoyar la poligamia, pero tampoco que debamos odiar a alguien porque se va con otra persona.

 No tenemos Amor sino apego, pues nos sentimos solos y nos creemos incapaces, inútiles, indefensos ante la soledad.

A veces no amamos tanto como creemos; solo queremos que nos acompañen, tener a alguien junto a nosotros todo el tiempo, y esto puede ser amor; pero también es egoísmo.

Por eso, cuando vemos la pareja en compañía de otra persona, se nos revuelve la sangre.

En ocasiones, lo que más queremos es a nosotros mismos, y deseamos compañía por temor a nuestra soledad; este es el motivo de los celos, que no son Amor.

Rubén Cedeño;”Rayo Rosa”. – Edic.conjunta: EDIT.MANIFESTACION & EDIT.SEÑORA PORTEÑA.


CUANDO SE AMA VERDADERAMENTE Rubén Cedeño

CUANDO SE AMA VERDADERAMENTE Rubén Cedeño



Junín-Argentina 10-6- 2013

Cuando se ama verdaderamente, con ese Amor que no conoce separación, uno es lámpara para sí mismo, como dice el Señor Gautama y sique al lado de su facilitador, maestro, grupo, y discípulos, sin ni siquiera ocurrírsele ningún distanciamiento por el sufrimiento que causa el distanciamiento, cuando no se ama se usan estas mismas palabras del Buddha para justificar la gran herejía de la separación, como decía Blavatsky. Ninguna lámpara ha salvado a nadie, el Amor siempre lo salva todo.

Todos los que usan las palabras del Señor Gautama “Sean Lámparas para ustedes mismos” para justificar separarse de sus grupos y facilitadores, no tienen amor, ignoran que el Señor Gautama también dijo “Me refugio en el Buddha” que es el Maestro, “Me refugio en el Dharma” que es la Enseñanza y "Me refugio en el Sangha" que es el grupo. Si no tienes amor te decidirás separarte para ser Lámpara para ti mismo como un Pratyeka Buddha, o iluminado egoísta, futuro mago negro. Si tienes Amor te decidirás por ser Lámpara para ti mismo tomando los tres refugios y ser un Nirmanakaya, un Buddha de Amor Compasivo.

El Señor Gautama jamás dijo “Sean Lámparas para ustedes mismos" para fomentar la herejía de la separación y que lo abandonaran a Él, de hecho ninguno de sus discípulos se separó de Él por estas palabras porque lo amaban, era un Sangha o grupo unido. El que ama no se separa, se separa el que le falta amor.

Por favor les ruego a todos no seguir usando las palabras “Sean Lámparas para ustedes mismos” para fomentar o respaldar la separación de estudiantes con facilitadores o grupos, eso es siniestro fruto de la hermandad egoísta de pratyekas buddhas y eso no era lo que buscaba el Señor Gautama, su vida y la de sus grupos lo que demostraron fue unidad y Amor Compasivo.