La gratitud o agradecimiento como práctica espiritual.
La primera celebración de “Acción de Gracias” que se realizó en la Metafísica, dirigida por Conny Méndez, fue en el Caracas Hilton, el mismo día en que Lastenia me habló por primera vez de Metafísica y, por supuesto, esa reunión me la perdí; fue el 26 de Noviembre de 1969.
Como Conny había estudiado Metafísica en los Estados Unidos, se acostumbró a celebrar el “Día de Acción de Gracias” y le transmitió en herencia, a los metafísicos, esta linda costumbre. El “Día de Acción de Gracias” se celebra cada año, el penúltimo jueves de noviembre.
La segunda celebración de “Acción de Gracias” de la Metafísica no me la perdí, ya que estaba totalmente incorporado; fue en la Cruz Roja Venezolana y la gente no cupo. Allí, fue la primera vez que Conny Méndez me pidió que dirigiera masivamente el Himno de la Metafísica, “Yo Soy Perfecto”
En los años sucesivos, después de 1972, comenzamos a celebrarlo en el Parque del Este, donde se reunían 9 mil personas y nos vestíamos con unas ruanas, o ponchos, cada una del color del rayo que uno quisiera, y nos agrupábamos los de cada color en ruedas, formando un cuerpo causal –los de azul en el centro, los de amarillo más afuera, y así sucesivamente– para hacer decretos. Generalmente, Conny Méndez, Carola de Goya, Ana Mercedes Asuaje de Rugeles, Angélica Romero y el que les habla, se sentaban en una concha acústica que estaba en alto, desde donde todo el mundo los veía. Conny Méndez dirigía, Carola hablaba y yo cantaba.
Conny y yo siempre nos sentábamos juntos, uno al lado del otro, para hacer chistes de todo lo que sucedía y reírnos a nuestras anchas; esto lo hacíamos a hurtadillas, hasta en las más reverendas clases. Una vez, sentado delante de todo ese gentío del “Día de Acción de Gracias”, en la Concha Acústica del Parque del Este, y teniendo los ojos cerrados, Angélica Romero dirigía la Meditación. Conny me llamó moviendo el codo y me dijo: “Abre los ojos y mira esa cucarachita que va por el escenario, derechito a meterse debajo de la falda a Angélica; hagámosle un tratamiento”. Eso hizo que me fuera en risa, pero realizando esfuerzos por no soltar una carcajada en tan solemne ocasión. Volvimos a cerrar los ojos, cuando de repente, Conny me vuelve a llamar y esta vez asume la dirección del decreto, afirmando: “Mira cucarachita, ya yo te di la orden de que no te le metieras debajo de los fustanes a Angélica”. Al terminar la reunión y acercarse la Profesora Rugeles muy circunspecta, Conny le preguntó: “Y qué te pareció la reunión, Anamer?”, y la Profesora le contestó: “Todo estuvo muy bien. Lo que no me pareció bien es que tú y Rubén se estuvieran riendo durante la meditación, delante de tanta gente”. Quedamos regañados como unos niñitos tremendos.
Debido a esta costumbre que Conny Méndez me enseño nunca he dejado de celebrar los Días de Acción de Gracias y a los que han estudiado conmigo y a todos los grupos metafísicos del mundo le he transmitido esta hermosa costumbre, incluso los he llevado cantidades de veces a Plymouth donde se celebro el Primer Día de Acción de Gracias, por cierto que hasta un video grabe allí y en el libro “Espíritu de la Navidad” esta la explicación detallada del suceso.
Ruben Cedeño del Libro "Memorias Metafisica"
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