OBSERVACIÓN
Cuando nos observamos, desarrollamos la
Conciencia Crística,
dándonos cuenta de lo que vivenciamos, sin agregarle
calificaciones ni conceptos negativos de ninguna índole, sin etiquetar,
fragmentar o conflictuar.
Eso nos despierta, poniéndonos alertas
mentalmente;
hace que nos conozcamos;
nos pone inteligentes, sabios, comprensivos;
provoca que nos sintamos extraordinariamente
vivos,
ubicados en el presente inmediato,
en la plenitud del lugar donde
estamos en “el aquí y el ahora”,
sin ver el pasado,
llenos de una especial vitalidad, sensibles,
amorosos;
provoca que sobrevenga en nosotros un silencio
místico y sobrecogedor,
plenos de Amor Compasivo, que inunda TODO lo
que nos rodea, produciéndonos paz y bondad.
“Pilares”, de Rubén Cedeño. –Edic.
conjunta: EDIT. MANIFESTACIÓN & EDIT. SEÑORA PORTEÑA.
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