Los Átomos Maestros al ir
a encarnar, van atrayendo los Electrones de cada plano correspondiente al cuerpo que se va a
crear.
Con la vibración que al
individuo le toca poseer, de acuerdo a la vida que ha llevado en vidas
anteriores, se le contabiliza cuántos Electrones tiene que redimir.
Éstos serán los
problemas, dificultades, situaciones que tendrá que resolver al volver a la
encarnación.
De acuerdo a la virtudes
de Dios que le tocará desenvolver a la “Corriente de Vida” en su “Plan Divino
de Perfección”, serán las cualidades de los electrones, que atraerá en la
formación de ciertos órganos de su cuerpo físico.
Si le toca ser pintor,
atraerá electrones ópticos de una gran sensibilidad; si va a ser músico, los
electrones del órgano de sus oídos serán de una aguda percepción; si va a ser
bailarín, los electrones de los músculos de sus piernas serán fuertes y
flexibles, y así sucesivamente.
Libro: “Transmutación Electrónica”, de Rubén Cedeño.
Editorial Manifestación
& Editorial Señora Independencia
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