CAMBIAR
LA CONCIENCIA
Para tratar a una
corriente de vida con miras a un desarrollo permanente de su naturaleza
espiritual, debemos cambiar la conciencia de ese individuo.
Todo pensamiento y
sentimiento que el estudiante considera, incluso por una fracción de segundo,
se vuelve parte de su conciencia y conforma el ambiente en el cual él debe
habitar.
Por lo tanto, el
estudiante debe comenzar a limpiar su conciencia de toda impureza e
imperfección.
La conciencia pura del
ser humano se contamina constantemente, con cada apariencia que él acepta y
deja entrar a su mundo, consciente o inconscientemente.
Estas apariencias que
habitan en él, conforman la causa que se refleja en la pantalla de su vida, y
permanecerán allí hasta que ese individuo elija limpiar su mundo interno con el
uso del Fuego Sagrado, y reemplace estos pensamientos y sentimientos vagabundos
por imágenes de pensamiento y sentimiento constructivas generadas conscientemente
y elegidas cuidadosamente, las cuales, por la misma Ley de la Vida, se
manifestarán en el mundo de la apariencia como perfección.
Cada hombre, mujer y niño
diseña su experiencia de vida con los pensamientos y sentimientos que mantiene
en su conciencia, y para cambiar el mundo externo, debe aprender a cambiar los
pensamientos y sentimientos internos.
Pensar en una condición
negativa e imperfecta es crear una imagen mental que permanece en lo invisible
y que tarde o temprano se manifestará en sus asuntos.
Deben aprender a pensar
en forma positiva, constructiva y perfecta.
Deben aprender a pensar
consciente y firmemente, y cuando comiencen a abrigar pensamientos de
opulencia, salud y paz, los mismos tomarán forma y habitarán entre ustedes.
Santo Aeolus; libro: “Espíritu Santo”.
Editorial Manifestación
& Editorial Señora Porteña.
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