HERCÓBULUS
Un pedido a la Ley
Cósmica permitió la creación de un pequeño planeta de vibración más baja que la
Tierra, donde los miembros
más involucionados de la
raza serían trasladados después de la muerte, evitando así que su presencia impidiera
el progreso de los demás.
En 1952 Lady Miriam dio a
conocer la creación de este planetoide , llamado “Hercóbulus”; luego, el
Maestro El Morya le cambió el nombre a “Excélsior”, es decir “Exelente”.
Esto significa que la
gente que no quiere aceptar vivir con Buena Voluntad, Sabiduría, Inteligencia,
Amor, Belleza, Excelencia, Verdad, Consagración, Paz, Armonía y Perdón; que no
desee cambiar su vida, no aspire a volverse positiva, se niegue a poner en
práctica las Virtudes que representan los Siete Rayos, que no quiera activar su
Presencia “YO SOY”, va a ser enviada a este planeta más atrasado.
Cuando afirmo esto, no me
refiero específicamente a “aquellos que no sean metafísicos”, porque no sólo
los metafísicos tienen a su alcance la instrucción de la Nueva Era, hay otras
escuelas que cuentan con ella.
Sé que Hercóbulus es
motivo de temor entre algunos estudiantes, así como de muchos chistes, como aquello
de:”Si no te pones las pilas, te van a
mandar a Hercóbulus”.
Esto es algo serio, no es
para chistes.
Nuestro compromiso es que
el mínimo de personas vaya a parar a dicho planetoide.
La creación de Hercóbulus
resultó un gran alivio, pues con ello, toda teoría de destrucción planetaria,
evacuación masiva por parte de extraterrestres, quedaba descartada, ya que no
sería necesario destruir la Tierra a causa de la negatividad de su gente; había
una forma de liberarse de ella sin una destrucción masiva, mandándola a Hercóbulus.
Del Libro: “Lady Miriam”, de Rubén Cedño; pág, 55
a 57.
Edición conjunta:
EDITORIAL MANIFESTACIÓN & EDITORIAL SEÑORA PORTEÑA.
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