SERVICIO DE HUMILDAD
Dice el Maestro Jesús; “¿Cuál es mayor? ¿El que se sienta a la mesa o el que sirve? ¿No es el que se sienta a la mesa? Más yo estoy entre vosotros como el que sirve.
El que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor, y el que quiera ser el primero entre vosotros será vuestro siervo.
Bienaventurados los mansos, porque ellos recibirán la Tierra por heredad.
Bienaventurados los pobres en el espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos”
Dice la Madre María: “Mi Alma Magnifica al Señor y el Espíritu se regocija en Dios, su Salvador, porque ha mirado la humildad de su esclavo.
Yo Soy el humilde esclavo del Señor”
Dice San Juan de la Cruz: “Para tener a Dios en todo, conviene tener en todo NADA. Humilde es el que se esconde en su propia NADA. Todas las criaturas NADA son, y las aficiones de ellas, menos que NADA.
Para venir a gustarlo todo, no quieras tener gusto en NADA. El que no tiene NADA, lo tiene todo. Todas nuestras obras y todos nuestros trabajos NADA son delante de Dios”
Dice el Hermano Francisco: “Procuren humillarse en todo, no gloriarse ni gozarse en sí mismos, ni exaltarse interiormente de las palabras y obras buenas; más aún de ningún bien que Dios hace o dice y obra alguna"
Restituyamos todos los bienes al Señor Dios altísimo y sumo, y reconozcamos que todos son suyos, y démosle gracias por todos ellos, ya que todos los bienes de Él proceden.
Y el mismo Altísimo y Sumo, el solo Dios verdadero, posea, a Él se le tributen y Él reciba todos los honores y reverencias, todas las alabanzas y bendiciones, todas las acciones de gracias y la gloria, porque suyo es todo bien, y solo Él es bueno”
ORACIÓN ANTE FRANCISCO
Amado Francisco, Señor de mí Corazón, soy indigno de estar delante de Ti, pero quiero estar contigo. Ven a mí.
No merezco que me ayudes, pero auxíliame que sin Ti no puedo vivir. Tú, viviendo como Dios manda eres tan humilde, que me avergüenzo de mi autoritarismo y agresión. Hazme humilde de corazón. Tú, siendo tan sabio, enseñas con tanta simplicidad, que reconozco mi ignorancia y orgullo intelectual. Hazme manso de corazón. Tú, siendo tan amoroso, no eres presumido. Ante Ti reconozco mi falta de amor y creerme una gran cosa. Hazme suave de corazón. Tú, siendo tan bello espiritual mente, eres tan sencillo, que reconozco mí mediocridad y altivez. Hazme simple de corazón. Tú, viviendo en la Verdad, eres tan modesto y llano, que reconozco mi mentira y arrogancia. hazme dócil de corazón. Tú, siendo tan grande, eres tan recatado, que reconozco ser nada y orgulloso. Hazme ser “nonada”
Ayúdame, delante de ti soy un pobre ser, impotente, incapaz, imposibilitado de hacer lo grande, importante y responsable que hay que realizar con la Enseñanza Espiritual. Conoces mis fallas, no merezco hacer lo que hago ni que me tomes en cuenta pero siempre me dices presente y me apoyas. Jamás me das la espalda ni me abandonas, ni en la noche más oscura. Nunca me acusas de lo malo que hago, de mis errores, ni reprochas mí conducta, de todo me perdonas. Esto me hace seguir adelante realizando lo que hago. Perdonándole a los demás las injusticias que me hacen.
Tú eres mí ejemplo e inspiración para vivir. Gracias a TI, comunico la Enseñanza a todas las personas, sin condenar a nadie. A Ti Te debo eso. En Ti descansa mi alma. Tu casa es mi hogar, me recuesto en Tu pecho, aprendo de Tu Corazón la manera de ser espiritual.
INCLINEN SUS CABEZAS Y RECIBAN LA BENDICIÓN DEL HERMANO FRANCISCO:
“EL SEÑOR TE BENDIGA Y TE GUARDE”
“EL SEÑOR TE MUESTRE SU FAZ Y TENGA COMPASIÓN DE TI”
“EL SEÑOR VUELVA A TI SU ROSTRO Y TE DE PAZ”
Amén, Amén y Amén. Eternamente, Amén
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