ESPÍRITU ENVOLVENTE
El Espíritu Envolvente es un Ser de Luz que durante un año en especial le ofrece a la tierra un regalo de su aura con la radiación de uno de los Siete Aspectos de DIOS, para beneficiar a la raza humana en su evolución.
Esta influencia se siente en la tierra por señales externas, como películas, canciones que se graban, sucesos positivos e influyentes que se relacionan con el Espíritu Envolvente, y su beneficio lo recibe todo el mundo, sea espiritual o no.
Cada año, a la hora 0:00 entre el 31 de Diciembre y el 1* de Enero, entra el Espíritu Envolvente del año nuevo y cubre completamente a la tierra con su aura.
Junto con esta descarga, se precipita el Tema del Año y el Pensamiento Forma.
Esta actividad redunda en beneficios para el planeta, ya que junto con el Espíritu Envolvente se prepara la publicación de literatura, Servicios y meditaciones especiales, para que su efusión sea de mayor provecho para la humanidad.
El aura del Espíritu Envolvente comienza a tomar posesión de la tierra en el primer lugar donde es la hora 0:00 del día de Año Nuevo, y tarda 24 horas en cubrir todo el planeta.
Esto quiere decir que el Espíritu Envolvente arropa a New York, Vancouver, Tokio, Samarkanda, Moscú o El Cairo en el momento en que allí y en todo su meridiano llega la hora 0:00 del día de Año Nuevo.
A esa hora se realiza un Servicio especial apropiado, que es suministrado por varias vías, incluso por internet.
Con el solsticio de verano, el 21 de Junio, que es la mitad del año solar, el Espíritu Envolvente del año por venir comienza a introducir su radiación, mientras empieza a diluirse la del Espíritu Envolvente regente.
De esta forma, durante los meses que siguen hasta fin de año, paulatinamente, los reinos de la naturaleza se preparan para recibir la nueva efusión.
La medianoche del día de Año Nuevo es el clímax de la radiación del nuevo Ser que asume la regencia como Espíritu Envolvente.
Previo a la entrada del Espíritu Envolvente, hay seis meses de preparación para esta reunión; mientras tanto, en la tierra, los estudiantes, en sus diferentes estados de conciencia, preparan publicaciones, invocaciones, música, actitudes y actividades armónicas con la radiación del Espíritu Envolvente por venir.
La tierra pasa seis meses, de Enero a Junio, con la radiación más intensa del Espíritu Envolvente del año, y este es el momento de absorber, mediante el Santo Aliento, las energías que este Ser trae de regalo a la humanidad.
De Junio a Diciembre, paulatinamente, las auras del Espíritu Envolvente regente y del que vendrá se comienzan a entrelazar, hasta que en Enero queda la energía pura y absoluta del Nuevo Espíritu Envolvente.
Este es el ciclo de la Rueda Cósmica que se repite incesantemente año tras año, trayendo desde Shamballa cada vez más luz, en este proceso de Ascensión Planetaria.
En virtud del cumplimiento de dos leyes, que son las de Causa y Efecto y la de Correspondencia -que dice "como es arriba es abajo"- con solo observar y con un poquito de inteligencia, uno puede percibir la radiación del Espíritu Envolvente de cada año en particular.
El que un no sepa algo no da derecho a negarlo.
Hay gente que desconoce estas cosas, y por eso rechaza y critica la actividad de que se anuncien los Espíritus Envolventes, negando su veracidad; pero no pueden negar el bien y la motivación que produce el despliegue de literatura espiritual, grabaciones, música, meditaciones y cosas bellas que se publican del Espíritu Envolvente de un Año.
Es una motivación anual para trabajar por el objetivo de un Ser de Luz durante un año, y esto es algo que todos respetamos inmensamente.
Lo importante del Espíritu Envolvente es que hay un objetivo anual grupal, mundialmente conocido, donde se da a conocer la vida y obra de un Ser de Luz para ayudar a alivianar la carga negativa de la tierra, contribuyendo con su Ascensión.
Esto es incuestionablemente beneficioso.
Hay almas conectadas a este nobilísimo propósito que lo propagan; y por encima de las críticas de las personas que no conocen dicho propósito, siempre se seguirá haciendo, hasta la Ascensión de la humanidad y hasta convertir esta Tierra en la Santa Estrella de la Libertad.
Esto solo tiene una finalidad:
"Ayudar al Ser Humano", servirle a cada individuo en su plan de evolución y asistirlo para que enderece las torceduras que ha generado en su vida, al quebrantar los Siete Principios Universales.
Del Libro ESPÍRITU DE LA NAVIDAD (pág. 64-66) - Autor: RUBÉN CEDEÑO
Edición Conjunta: EDITORIAL MANIFESTACIÓN & ED. SEÑORA PORTEÑA
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